AL VALLE DEL ALHAMA

                    I

                     (Dulce valle)

   Desde que te llamo dulce valle,

desde que te llamo así

por tu afable nombre,

nunca te haces extraño a mí,

ni ajeno, ni remoto,

así eres mucho más cercano,

y eres mucho más estimado,

y tengo aquí en mi alma

tu dulce nombre clavado.

   Es una invisible cadena

en la que me veo atado,

me liga a ti, aunque no quiera

por tu rebelde belleza;

me ata a ti aunque no quiera,

y si te nombro soy tu esclavo.

   Tus enfados airados se amansan

en cuanto tu nombre declamo,

y con este nombre rompo

dócilmente tu arrebato.

   Aquí, en las oscuras choperas

como en los claros peñascos

los ecos de las montañas

hacen de tu nombre canto,

y bien sabes... que al nombrarte

lo cerca que tú y yo estamos...

De mi libro "CANTOS AL AMANECER"