sábado, 18 de junio de 2011



REFLEXIONES EN ARMONÍA

  Decimos que vivimos en armonía cuando existe una grata compatibilidad con los que nos rodean.
  Armonía es una conveniente proporción y correspondencia de unas cosas con otras.
  Para que haya armonía una parte debe de ir al compás de la otra, si no, esta se rompe y se pierde.
  La naturaleza también necesita un director para renovarse cada día y esta incluye al ser humano.
Todos necesitamos de un guía para vivir en armonía, porque nadie es autosuficiente y fuimos creados en armonía, a imagen y semejanza de nuestro Creador. Nadie mejor que Él sabe cómo debemos vivir la vida que El nos dio.
  ¿Por qué tantas personas no pueden vivir en armonía con los demás? ¿Por qué algunos seres humanos no pueden vivir en armonía ni consigo mismos?
  El hombre es tripartito: cuerpo, alma y espíritu. Entre estas tres partes debe haber armonía, de no ser así, todo el ser se tambalea y por lo tanto pierde su forma como ser.
  Un alma enferma, un alma que alberga rencor, odio, resentimiento, está rompiendo la armonía en su ser.
  Para vivir en armonía con nosotros mismos debemos vivir en armonía con Dios. La primera pareja humana vivía en armonía con las consecuencias que ya conocemos.
  Para vivir en armonía con nosotros mismos y con los demás debemos amarnos los unos a los otros. Muy difícil, pero así se consigue la armonía.
  Si no perdonamos a quien te ofendió, el rencor te traerá amargura y este es una carga muy pesada que cargarás tú solo y nunca podrás tener armonía contigo mismo.
  Vive en armonía con Dios para que tu vida esté llena de armonía y de esta manera vivirás feliz.
  Busca la sabiduría en tu paso por la vida, la encontrarás en los ecos de los amigos; nadie mejor que ellos habrá de otorgarte ese precioso legado.
  No permitas que nada ni nadie turbe tu camino, compórtate de forma transparente y clara y si caes en alguna falta sé humilde, sé benevolente contigo mismo y estarás viviendo en armonía.

  

No hay comentarios:

Publicar un comentario