domingo, 28 de febrero de 2021

 

ROMANCE A LA VIEJA FENESTRELLAS

En el año mil quinientos

en calle estrecha y torcida

Inestrillas fue aledaños

de otra ciudad ya perdida;

celtíberos por más señas

eran sus gentes habidas

llegados de tierras vanas,

parados en esta quinta.


Viviendas rupestres


La arquitectura rupestre

en el farallón cavadas,

son textos que nos dejaron

otras culturas lejanas.

Al no existir la escritura

para conocer su historia,

nos servimos de sus cuevas

que son la mejor memoria.

Por eso en la pared rocosa

está el testimonio escrito

de aquellos que aquí vivieron

antes que naciera Cristo.

La lucha por su existencia

fue una combate natural,

por eso se dedicaban

a recolectar y a cazar.


Tranquilos y sosegados

vivió este pueblo y su gente,

pero otros pueblos llegados

pactaron indignamente.

Este pueblo al que aludimos

era población romana

nacidos para las guerras

curtidos en mil batallas.

Pronto el pueblo celtíbero

halló nuevo emplazamiento,

llamarían “Ciudad Blanca”,

por Contrebia conocemos.

Después de luchas y luchas,

después de ser humillados

nos encontramos entonces

vencidos por Sertorianos.


El palacio


En el farallón rocoso

hay profunda y negra cueva

donde vivieron los monjes

consagrados a su ofrenda.

A allí vivió Juan Manuel

González de Castejón,

que presto mandó edificar

palacio en el farallón;


Y con un sobre en la mano

claro y con determinación,

salió a dirigir el mismo

las obras de la gran mansión

en la que muestra un empeño

fiel a su noble condición,

y al poco tiempo termina

esta histórica mansión…,


se alza como una colmena

de manera muy especial,

y si contamos el tiempo

de este excéntrico palacio

vamos al mil setecientos

que al cabo hoy festejamos

fecha de su nacimiento

que es un motivo muy grato.


De cuatro hijos que tuvo

Juan González de Castejón,

Pedro fue el de más coraje

y el de mejor condición,


también título de Marqués

tuvo este gran marinero;

fue Ministro de marina,

Conde de Ágreda, primero.


Años de grandes ejemplos

nos dio el hijo más hidalgo,

fue Ministro de marina

para España y el rey Carlos,

y allí en los grandes combates

estuvo él con los primeros

y siempre fue el gran ejemplo

de todos los marineros.


El rey con semblante alegre

se alza presto del sillón,

pues acaba de enterarse

que en otra batalla venció.

Y haciendo mil reverencias,

otra después, y otra luego,

sale dispuesto al balcón

a proclamar al vencedor

que sin duda no es otro

que González de Castejón.


La cárcel


En la cárcel de Inestrillas

que es una caverna oscura

y con un candil de hierro

que da más sombra que alumbra,

pasaba una extraña escena

a la que uno no acostumbra

ni en horrenda pesadilla

ni en sueños se nos revela.


Y al tiempo en que el ocaso

su perenne lumbre oculta,

el sol la tierra y los cielos

entre tinieblas se enluta;

en un cancillo sentado

y con negras vestiduras

está el corregidor Cenón

con mal genio y cara adusta...

En la cárcel de Inestrillas

sepulcral silencio reina…,

pues solamente se escucha

el chisporrotear de una tea...

Pronto el severo alcalde

con voz sepulcral rotunda,

ordena acerquen al preso

que ha de sufrir tortura.


Allí estaban encerrados

sarracenos y cristianos,

unos por rezos de moros

otros por alargar las manos,

y a su lado en una mesa

que más parece una tumba,

dispone un viejo notario

la sentencia que aún retumba.


El preso que comentamos

es don Diego del Redal,

miembro de antiguo linaje

estirpe de los del Redal

y de su esposa “La Recia”

cadáver en aquel lugar,

y don Álvaro Cubillo

que fue puesto en libertad...

El castillo


Hay un castillo en la roca

que fue lar de doña Sancha

linaje de los Hinojosa

los dos, esposo y esposa.

Un nieto muy destacado

Rodrigo Ximenez Rada

fue arzobispo de Toledo

que inició la reconquista

en las Navas de Tolosa

y gracias a él no es España

ni mora ni musulmana.

Los señores de Hinojosa

fueron hermanos del Temple,

y ellas también grandes damas

ejercieron de templarias.

El dominio de la Villa

sin olvidar la alcazaba

a través de doña Sancha

pasaron a los Azagra…,

-la gran estirpe navarra-.


En las tardes del estío,

cuando el ocaso se inclina

el sol entre blancas nubes

de oro y grana se matiza

trayendo calma a la noche

que alumbrará el nuevo día.


Y así se escribe la historia

de este pueblo del Alhama,

historia de grandes hombres

que nunca nadie declama.

Y esta es la historia más fiel

de la vieja Fenestrellas

que os puedo yo ofrecer;

contarlo a vosotros ha sido

un verdadero placer.


Ricardo Lalinde López


Inestrillas, 8 de septiembre de 2019


Poema dedicado al viejo pueblo de Inestrillas,

la “Vieja Fenestrellas”, a sus habitantes y sus alojamientos. Poema comentado en las visitas guiadas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario